Una Copa del Rey es un saldo insuficiente para un equipo que se ha hinchado a ganar títulos en la última década. Si tu máximo rival hace un doblete que llevaba medio siglo sin conseguir, el sentido de urgencia se puede multiplicar. El Barcelona se enfrenta a uno de los veranos más exigentes de su historia reciente. Ernesto Valverde ha sido elegido por la directiva para reconducir a un conjunto que necesita refuerzos, especialmente en defensa y en el centro del campo. Marco Verratti y Héctor Bellerín son dos futbolistas que parecen prefabricados para triunfar en el Barcelona.
Héctor Bellerín, fichaje doble
Uno de los problemas del Barcelona esta temporada ha sido la ausencia de un lateral derecho específico. Aleix Vidal (volante reconvertido) no contó con la confianza de Luis Enrique hasta poco antes de su lesión y Sergi Roberto no deja de ser un centrocampista. La llegada de un lateral diestro, además de cubrir una necesidad de personal, permitiría a Valverde utilizar a Roberto en la zona ancha, bien como recambio de Busquets o incluso como interior en ciertas situaciones.
Héctor Bellerín, que jugó hasta los dieciséis años en las categorías inferiores del Barcelona, es uno de los favoritos de la dirección deportiva azulgrana. El español, de 22 años, lleva dos cursos completamente establecido como titular en el Arsenal. Sus características son las idóneas para un equipo grande. En el último ejercicio ha sido el defensa que más regates ha hecho de la Premier League (47) con un 80% de acierto. Entre los defensores es el segundo con más asistencias (4). Marcelo, lateral izquierdo del Madrid y considerado por casi todos los expertos el más dinámico del mundo, ha tenido la última temporada un 67% en regates completados (45 total). Bellerín agregaría al Barcelona sorpresa en la derecha, amplitud, velocidad y retorno sin balón.
Marco Verratti contra el ocaso de Iniesta
Andrés Iniesta tiene 33 años y es un factor que el Barcelona debe asumir. El genial centrocampista se ha perdido 26 partidos por lesión en las últimas dos temporadas y ya está en un punto de su carrera en el que hay que dosificar sus apariciones para aprovechar sus últimas gotas de talento. El problema para Luis Enrique es que ninguno de sus potenciales sustitutos (Rafinha, Denis Suárez o André Gomes) ha dado el nivel. El Barcelona ha terminado por perder la personalidad y esencia en el centro del campo, un departamento que le llevó a dominar el fútbol.
Marco Verratti encaja a la perfección en el perfil de mediocampista que necesita el Barcelona. El italiano del PSG es un interior de los que ofrecen calidad a la posesión en campo contrario, excelente toma de decisiones y pocos errores. Es un futbolista acostumbrado a amasar balón (más de 2.000 pases buenos en Ligue 1 con 89% de acierto). Su llegada refrescaría el centro del campo azulgrana y permitiría a Valverde dosificar a Iniesta. Y Verratti se deja querer.
¿Encajaría Coutinho en el sistema?
Desde que se juntó la explosiva MSN, el Barcelona ha mutado hacia un equipo de delanteros. Lo que pasa detrás de Messi, Suárez y Neymar ha ido de alguna manera ‘perdiendo’ importancia más allá de garantizar la sostenibilidad mínima. Para ser sólido precisa de un pivote como Busquets, alguien que aporte recorrido como Rakitic y un cerebro capaz de coser el juego y eliminar líneas de presión al nivel del mejor Iniesta.
En ese contexto MSN-centrista cuesta encajar a otro de los que suena, Philippe Coutinho, un mediapunta fenomenal. Aunque tiene capacidad para jugar un poco más retrasado, el brasileño del Liverpool es mejor cuanto más cerca está del área. Sus trece goles y siete asistencias en Premier League lo evidencian. Probablemente el Barcelona necesite más un interior más puro que le ayude a tener jerarquía en el centro del campo y controlar los partidos que otro genio en los últimos tres cuartos de cancha. Con la productiva MSN, lo segundo está garantizado. La temporada 2016-17 ha demostrado que lo primero, después de muchos años de dominio, no se puede dar por sentado en este Barcelona.