Aunque la manera de actuar de Neymar y sus representantes nos parezca muchas veces veces cuestionable, lo del amor a unos colores es simplemente una quimera que ya no se cree nadie, esa realidad no puede imponerse a la tristeza por la pérdida de un fenómeno, un artista, un jugador único. Por mucho que algunos se empeñen en vestir al brasileño de pesetero, mercenario o egoísta no van a poder borrar de nuestra memoria lo que le hemos visto hacer, las veces que nos ha sorprendido y levantado del asiento con una jugada maravillosa, los buenos ratos que nos ha hecho pasar a todos los aficionados. Neymar es un jugador diferente, por eso se pelearon por él Barça y Madrid, porque sabían que era un genio en potencia, llamado a convertirse en un icono mundial como ya es. Que se vaya de nuestra Liga es una pérdida para todos: su equipo, los rivales, medios de comunicación, patrocinadores, aficionados … Una verdadera lástima.
¿Se va solo por dinero? Creo que no. En el PSG se va a convertir en la bandera del club, en el líder que puede dar el último impulso a ese equipo para competir de verdad con los grandes de Europa. Tendrá que crecer en mando y responsabilidad, algo que los grandes jugadores tienen que hacer para demostrar que aparte de fútbol poseen esa personalidad que encumbra a los mitos de este deporte. Es una realidad que Neymar en el Barça tenía a Messi por delante. En el escaparate, en la repercusión mediática, en las portadas, en el Olimpo…El argentino eclipsaba a Neymar. Un ejemplo muy claro fue el famoso partido de vuelta ante el PSG, donde el mejor del Barça en la remontada fue Ney, pero la foto que pasó a la historia fue la de Messi subido a la grada abrazado por los aficionados. A Neymar se le ha comparado inevitablemente con Messi y se le han escatimado elogios y reconocimiento. Era muy difícil que creciera más a la sombra del número uno.
Veremos hasta dónde llega en su nuevo reto, camino tiene por recorrer. Mientras tanto recordemos y disfrutemos de aquellas maravillas que Neymar nos dejó por aquí, como aquel gol marcado al Villarreal en el Camp Nou que nos dejó y nos deja con la boca abierta.