Hace meses que en Barcelona se dice que la renovación de Messi es un hecho y se está buscando una fecha para hacer oficial la misma con un acto público a lo grande. Hay incluso quien afirma que el jugador está cobrando ya su nuevo contrato y está despreocupado del protocolo. Pues qué quieren que les diga, yo estoy preocupado. ¿Cómo puede ser que en cuatro meses no hayan encontrado un día cualquiera para hacer unas fotos a Leo firmando el documento? ¿Por qué el presidente Bartomeu ha pasado de sonreír a las preguntas sobre el tema a sencillamente evitarlas? ¿Cuál es la razón por la que algunos compañeros no se atreven a afirmar que Leo seguirá en el Barça como hizo Rakitic el martes? ¿A qué se debe el enfado de Valverde cuando le preguntan por el asunto? Si todo está tan atado y bien atado, no se entienden los nervios que se transmiten desde el Camp Nou.
Vaya por delante que la salida de Messi sería una noticia terrible, no solo para el Barça sino también para toda la Liga. Nos quedaríamos huérfanos. Por eso el asunto empieza a ser preocupante de verdad. El pasado sábado el cantautor Joan Manuel Serrat publicó una carta en el diario El País en la que mostraba su temor a que el 1 de enero Messi pueda negociar con cualquier otro club del mundo. Se comenta que el presidente azulgrana contactó telefónicamente con él para tranquilizarle, pero sigue sin haber un comunicado oficial.
Hoy Messi recibe en un acto público la Bota De Oro que le conceden por ser el máximo goleador en Europa de la pasada temporada. Está previsto que el argentino conteste a algunas preguntas del presentador del acto. Si no le preguntan por su renovación y confirma con una respuesta clara y contundente que va a seguir jugando en el Barça varias temporadas más…¡Cuidadito!
¿Qué motivo puede tener Messi para no firmar su nuevo contrato y hacerse una foto con el presidente? No lo quiero ni pensar. Ojalá solo sea un susto y Leo nos saque de dudas hoy mismo, pero si no es así, yo me echaría a temblar.