Cristiano Ronaldo podría dejar el Real Madrid de inmediato. Lo que hace pocos días parecía un escenario inimaginable es ahora una situación que suena plausible y para la que Florentino Pérez y Zinedine Zidane tienen que prepararse. La salida del portugués representaría la baja del jugador más importante del equipo durante la última década. Una máquina de marcar goles y coleccionar trofeos que el Madrid tendría que reemplazar en el mercado de fichajes con uno de los mejores nueves del mundo. De forma paralela a agregar jugadores como Mbappe o Donnarumma, al Madrid se le presentaría un descubierto en el apartado goleador que estaría obligado a resolver.
Sin Cristiano, el Madrid necesita comprar gol
El Cristiano Ronaldo que llegó al Real Madrid en 2009 era un jugador total que arrancaba desde la izquierda, regateaba, conducía el balón hasta posición de remate y tenía la capacidad de finalizar. Una amenaza dinámica con mucho campo de acción.
El Cristiano Ronaldo de 2017 es eminentemente un finalizador. Probablemente el mejor del mundo y uno de los mejores de todos los tiempos. Zidane y el Madrid no tendrán que buscar en el mercado alguien que regatee o cree ocasiones. Hasta ocho futbolistas del Madrid han generado más oportunidades que Cristiano esta temporada en LaLiga y ha promediado menos de un regate por partido.
El delantero del Madrid ha sido el máximo goleador del equipo en todas las temporadas que ha estado en el club. Sus cifras son elocuentes: 406 goles en 394 partidos. El 33% de los goles del equipo en LaLiga desde que está en España han llevado su firma. En los últimos tiempos, Cristiano ha sido un rematador. Ocho de los diez goles que ha marcado en su impresionante primavera en Champions League llegaron al primer toque. Nueve de ellos dentro del área. En los cinco partidos desde cuartos hasta la final de Cardiff, Cristiano completó cuatro regates. Contra la Juventus ni siquiera intentó uno.
Lewandowski garantiza gol
Si el Madrid hubiera tenido que sustituir al Cristiano de 2012, hubiera tenido que buscar en el mercado un jugador total. Ahora, ‘simplemente’ tiene que encontrar a un goleador. Un hombre gol capaz de aprovechar el fútbol que genera el Madrid por dentro, con los Modric, Isco o Asensio y por fuera con sus dinámicos laterales. Alguien que tampoco tiene por qué estar muy involucrado en el juego. “Cristiano es el mejor rematador del mundo. Puede estar unos partidos más o menos flojo, pero al final siempre hace los goles. Y, ¿qué es lo que manda en el fútbol? Los goles. ¿Y quién mete los goles? Cristiano, el mejor en ese sentido”, dijo el histórico Santillana.
Uno de los delanteros más interesantes de Europa, y que siempre ha estado en la órbita del Real Madrid, es Robert Lewandowski, un goleador implacable. En sus dos últimas temporadas ha superado la barrera de los cuarenta con el Bayern de Múnich. Como el Cristiano de la actualidad, el polaco es un hombre de área (siempre lo ha sido), un rematador que maneja bien las dos piernas, domina el juego aéreo y está acostumbrado a la exigencia de un equipo grande. A Lewandowski nadie le va a pedir bajar a media cancha a iniciar el juego o driblar a varios rivales. Lo suyo es poner el balón en la portería.
Morata, en stand-by
Además de Cristiano y más allá de Benzema, que nunca ha actuado como un nueve clásico, la figura más próxima al delantero de toda la vida que tiene el Madrid es Álvaro Morata. Antes del bombazo sobre la posible salida de Ronaldo, el español parecía resuelto a fichar por el Manchester United. Esta operación ahora está parada desde los dos costados. Desde la capital de España porque no habrá movimientos de peso hasta que se resuelva la situación de su estrella y desde la industrial ciudad inglesa porque el United sería el destino más apetecible para Cristiano en el caso de materializarse su salida.